Feeds:
Entradas
Comentarios

Archive for 5 de octubre de 2020

Momento de Reflexión

Diego Fares sj

En el centro de los ejercicios está la elección o reforma de vida con su confirmación.

Fiorito afirma que todos los documentos de los ejercicios -las meditaciones, las reglas, las instrucciones prácticas- constituyen una unidad que él llama «kerigmática», en la que el anuncio y la contemplación del misterio de Cristo no apuntan a nuestras ideas meramente, sino que apuntan a desencadenar en nosotros ese discernimiento de espíritus que nos llevará a elegir y reformar nuestra vida según lo concreto que Dios nos da y nos pide.

La elección y reforma de vida no es solo la actitud subjetiva de nuestra voluntad que elige algo libremente, sino la unión de nuestra libertad con la libertad de Jesús: elegimos lo que él nos ofrece para elegir, la vocación o carisma con que nos invita a seguirlo y en el que nos bendice y hace dar fruto en la Iglesia para el bien común. Carisma que Él nos confirma una y otra vez, perfeccionando el primer llamamiento a lo largo de toda nuestra vida.

Fiorito señala que el tiempo de la elección, junto con la confirmación por parte del Señor, se extiende desde el primer misterio de la vida pública de Cristo hasta la Contemplación para alcanzar amor inclusive.

Considera la Contemplación para alcanzar amor, en la que uno «encuentra en paz a Dios nuestro Señor» -en la presencia gloriosa de Cristo resucitado en todas las cosas -, como la confirmación de todos los ejercicios. 

Es interesante la consideración de Fiorito de que la elección no termina en la Segunda semana, sino que se extiende en la semana de la Pasión y en la de la Resurrección. Fundamenta esto mostrando que San Ignacio sigue poniendo documentos de elección durante la Tercera y Cuarta semana. Estos son las Reglas para ordenarse de comer y los Coloquios de Tres binarios y Tres maneras de humildad. 

REFORMAR LA ELECCIÓN SIEMPRE PARA MEJOR

Lo que yo saco de esto es que el concepto de elección no es un concepto de algo puntual y subjetivo, sino que se abre a la reforma de la elección misma, profundizando siempre de nuevo en la totalidad del misterio de Cristo. Hay una gracia cuando Cristo llama -a Pedro y a sus compañeros, por ejemplo- a ser pescadores de hombres y ellos dejando todo eligen seguirlo. Pero esta elección el Señor la va perfeccionando a lo largo del seguimiento. No se trata de un simple seguir a Jesús tal como yo era en el momento de dejar todo, sino de un seguimiento en el que me dejo transformar por los criterios del Evangelio de manera radical en cada momento significativo de mi vida. 

Jesús les enseñará sus discípulos a discernir la voz del Padre de la del mal espíritu, les enseñará el criterio de que la autoridad reside en el servicio, que ser el más pequeño y servidor de todos es la condición para entrar en el Reino de los cielos, etc. Y ante cada nueva enseñanza será necesaria de parte de ellos una nueva elección y una nueva reforma de vida.

Cada vez que el Señor confirma alguna actitud evangélica, cada vez que le dice a alguien «tu fe te ha salvado» o, como le dice a Pedro, «Esto te lo ha revelado mi Padre», la elección se redondea, por decirlo así, y se convierte en elección de a dos: de Cristo y mía. Elección siempre en proceso de reforma y mejoramiento. 

JUNTO CON CADA MOMENTO DE ELECCIÓN HAY SIEMPRE UN MOMENTO DE CONFIRMACIÓN.

Hay una confirmación que se hace apenas uno ha hecho su elección o reforma de vida y le ofrece al Señor lo que ha elegido, como quien ofrece algo precioso a su rey señor y le pide que le muestre su complacencia.

San Ignacio dice que hacia el final de la Segunda semana, cuando uno ya hecho elección supuestamente, está la con la contemplación de la conversión de María Magdalena (EE 282).

Ignacio identifica aquí a María Magdalena con la pecadora que rompe el frasco de perfume y unge al Señor. Si la Magdalena, como dice el Evangelio, «llevó un vaso de alabastro de perfume y poniéndose detrás, a los pies de él, comenzó a llorar, y con sus lágrimas le mojaba los pies y con los cabellos de su cabeza se los secaba; besaba sus pies y los ungía con el perfume» (Lc 7, 37-38), nosotros, por nuestra parte, conviene que le manifestemos nuestro amor ofreciéndole nuestra elección o reforma de vida, «para que su divina majestad la quiera recibir y confirmar, siendo su mayor servicio y alabanza» (EE 183).

Así, la elección o reforma de vida que hacemos en el curso de la Segunda semana de los Ejercicios, es la respuesta a aquella pregunta que nos hacíamos durante la Primera semana, cuando, «imaginando a Cristo nuestro Señor delante y puesto en cruz, veíamos cómo de Creador es venido a hacerse hombre, y de vida eterna a muerte temporal para morir por mis pecados». Y nos preguntábamos «lo que he hecho por Cristo, lo que hago por Cristo, lo que debo hacer por Cristo» (EE 53). Esta última pregunta que entonces hacíamos —«lo que debo hacer por Cristo»— es la que ahora tiene respuesta en nuestra elección o reforma de vida como respuesta de amor a un amor que él primero nos ha manifestado (1 Jn 4, 10. 19; Rom 5, 8).

LA CONFIRMACIÓN DE JESÚS ENALTECE NUESTRAS ELECCIONES.

Vemos que el Señor confirma la actitud de la pecadora, así como confirmará también después la actitud de María, defendiéndola de las críticas de Judas. Estás confirmaciones que hace el Señor del modo que eligen amigas para demostrarle su amor, rompiendo su frasco de perfume y ungiéndolo con sus lágrimas, da a la elección un carácter sobrenatural. Puede tratarse de pequeños gestos de fe o de servicialidad como de acciones grandes de seguimiento del Señor: lo que elegimos nosotros, al ser confirmado por Jesús que muestra que eso le agrada, se consolida como un carisma especial. La confirmación de Jesús enaltece nuestras elecciones.

LA CONFIRMACIÓN COMO FORTALECIMIENTO

Hay otro tipo de confirmación que es el que se puede ver en la Tercera semana. Si hemos hecho la elección, se trata de animarnos contemplando padecer a Cristo en su pasión a resistir hasta derramar sangre, como hizo Jesús, todas las tentaciones que nos vendrán contra la gracia que hemos recibido en el momento de la elección o reforma de vida, cuando hemos conocido la voluntad de Dios y hemos sentido que nos confirmaba en ella. En la pasión podríamos decir que el Señor no solo reafirma que le agrada lo que hemos elegido, sino que nos fortalece, nos confirma -nos vuelven más firmes- en nuestra decisión, al verlo padecer por nosotros con amor.

Fratelli tutti: contribuir al bien de la especie y el planeta ofreciendo la amistad social, que es lo mejor de nosotros mismos

Fratelli Tutti es una Encíclica de síntesis, en la que el Papa retoma sus preocupaciones más entrañables acerca de la fraternidad universal y de la amistad social y las pone en un contexto amplio de reflexión.

La palabra amor aparece 87 veces. Pero no aparece cosificado en abstracto como cuando hablamos de «el amor», sino que aparece en su dimensión universal, en su dinamismo de creciente apertura a todos. 

En ese sentido podemos decir que la Encíclica es una Contemplación para alcanzar amor, no solo personal, sino amor social y político, amor fraterno y de amistad a todos los hombres, amor encarnado en actitudes concretas de predilección por los más abandonados.

De los consejos de San Francisco, el Papa dice: «quiero destacar uno donde invita a un amor que va más allá de las barreras de la geografía y del espacio. Allí declara feliz a quien ame al otro «tanto a su hermano cuando está lejos de él como cuando está junto a él» (FT 1).

En la parábola del buen samaritano – una parábola para reflexionar sobre un amor que se abre a todos (FT 82)- el Papa dice que no hay una enseñanza de ideales abstractos ni se circunscribe a una moraleja ético y social. La parábola nos revela una característica del ser humano: hemos sido hechos para la plenitud que sólo se alcanza en el amor» (FT 68). Esta es una de las frases que nos recuerda la contemplación para alcanzar amor. 

Es importante unir el cuidado de la casa común y el amor de amistad social. Cuando contemplamos la naturaleza podemos constatar que cada ser creado contribuye al bien común dando lo mejor de sí, nada menos. Lo mejor del ser humano es la capacidad de amistad y por eso con nada menos podemos contribuir al bienestar del planeta y de la sociedad. 

«Desde la intimidad de cada corazón, el amor crea vínculos y amplía la existencia cuando saca a la persona de sí misma hacia el otro. Hechos para el amor, hay en cada uno de nosotros «una ley de éxtasis: salir de sí mismo para hallar en otro un crecimiento de su ser». Por ello «en cualquier caso el hombre tiene que llevar a cabo esta empresa: salir de sí mismo» (FT 88). «El amor que es auténtico, que ayuda a crecer, y las formas más nobles de la amistad, residen en corazones que se dejan completar. La pareja y el amigo son para abrir el corazón en círculos, para volvernos capaces de salir de nosotros mismos hasta acoger a todos» (FT 89).

«Para estimular una sana relación entre el amor a la patria y la inserción cordial en la humanidad entera, es bueno recordar que la sociedad mundial no es el resultado de la suma de los distintos países, sino que es la misma comunión que existe entre ellos, es la inclusión mutua que es anterior al surgimiento de todo grupo particular. En ese entrelazamiento de la comunión universal se integra cada grupo humano y allí encuentra su belleza. Entonces, cada persona que nace en un contexto determinado se sabe perteneciente a una familia más grande sin la que no es posible comprenderse en plenitud» (FT 149)

El Papa desarrolla espléndidamente «El valor único del amor» – de un «amor efectivo» y «La creciente apertura del amor». Esta dinámica expansiva del amor que busca llegar al más lejano con lo mejor de nosotros mismos -la amistad- es el corazón de la Encíclica.

Momento para contemplar

Marta Irigoy

Muy clara la Meditación que nos regala el P. Diego!!

Quizás para este momento contemplativo, podemos tomar el Texto de la Unción de Betania, en Jn 12, 1-8. 

En  este relato se muestra a Maria; hermana de Marta y Lázaro, quien había sido alabada por Jesús, porque había elegido la mejor parte… (Lc 10, 38-42)… 

Podemos decir que Maria de Betania, es una mujer de sabias elecciones… aquellas elecciones que salen de la profundas certezas que emergen de nuestro interior, cuando en nuestra vida solo buscamos lo que más le agrada a nuestro Padre…

  • Ayudas para la contemplación:

Pido la Gracia: Que pueda Señor, elegir lo que te agrada…

Leo el Texto: Jn 12, 1-8:

“Seis días antes de la Pascua, Jesús volvió a Betania, donde estaba Lázaro, al que había resucitado. Allí le prepararon una cena: Marta servía y Lázaro era uno de los comensales. María, tomando una libra de perfume de nardo puro, de mucho precio, ungió con él los pies de Jesús y los secó con sus cabellos. La casa se impregnó con la fragancia del perfume. 

Judas Iscariote, uno de sus discípulos, el que lo iba a entregar, dijo:  «¿Por qué no se vendió este perfume en trescientos denarios para dárselos a los pobres?».                                                                                                         Dijo esto, no porque se interesaba por los pobres, sino porque era ladrón y, como estaba encargado de la bolsa común, robaba lo que se ponía en ella. 

 Jesús le respondió: «Déjala. Ella tenía reservado este perfume para el día de mi sepultura. 

 A los pobres los tienen siempre con ustedes, pero a mí no me tendrán siempre».

Me imagino la escena, “como si presente me hallase”. Como es el lugar? 

  • Veo las personas…
  • Oigo lo que dicen…
  • Miro lo que hacen…
  • Dejo que el Perfume también llene de fragancia mi vida…                                ¿Qué fragancia necesita mi vida?
  • Dialogo con alguno de los personajes que aparecen en la escena… Le pido lo que necesito. Agradezco lo contemplado. 

Puedes terminar la Oración con esta plegaria:

Quisiera hoy, en estas horas de mi caminar frágil,

dejar mi vida entre tus manos,

como vasija humilde, como barro confiado.

Dejar que modeles en mi alma tu proyecto;

permitirte conquistar mis ideas y mis actos;

prestarme para que también otros,

desde mi vida transformada,

puedan avanzar hacia la esperanza

y descubrir Tu Amor eterno.

Amen

Read Full Post »

A %d blogueros les gusta esto: